Santi tumbado al sol,
un día cuenta se dio…
¿Por qué me siento aquí tan bien?
¿Sería posible así permanecer?
Y dejó… su vida en la ciudad,
los caos de humos, el tráfico infernal.
Dejó… la lucha de aparcar,
bocinas y vueltas para nunca llegar.
Huyó de esa ansiedad
y ambiente cultural.
Marchó lejos a otro lugar
donde era posible el aire respirar.
El sol fue quien le contó
cómo construir, su felicidad.
Su felicidad…
Su felicidad…
Santi tumbado al sol,
un día cuenta se dio…
¿Por qué me siento aquí tan bien?
¿Sería posible así permanecer?
Y cambió su vida social,
por largos paseos en plena soledad.
Cambió, las ansias de triunfar,
por simples deseos del tiempo saborear.
Logró un nuevo hogar,
embriagado de paz.
Logró al viento oír cantar,
el olor de la tierra le dio su libertad.
El sol fue quien le contó
cómo construir, su felicidad.
Su felicidad…
Su felicidad…
Cómo construir, su felicidad.
Su felicidad…
Su felicidad…
Su felicidad….
De hacerle caso al sol,
nunca se arrepintió.
(Nota: Esta canción está inspirada en la historia de nuestro amigo Santiago,
al que podéis conocer a través de su Canal:
http://www.youtube.com/user/MarginalMedia)